La cota desciende hoy a los 700 metros y Meteorología prevé lluvias hasta el domingo.

Asturias estará durante la jornada de hoy en alerta por fuertes lluvias y nieve -la cota descenderá a los 700 metros, aunque durante el día se prevé que ascienda a los 1.200-, una situación que podría empeorar si se repiten las considerables rachas de viento que ayer azotaron algunas zonas del Principado.

El agua y la alta nubosidad seguirán siendo las protagonistas de la semana que hoy comienza. Los chubascos serán constantes, como mínimo, hasta el domingo. La única variación se verá en la intensidad. Según la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet), las temperaturas no sufrirán cambios. De hacerlo, podrían descender ligeramente.

Las precipitaciones fueron constantes durante toda la jornada de ayer. Hubo mucha lluvia, pero también granizo, como el que cubrió completamente el asfalto de Gijón a las nueve de la mañana y el que descargó en Oviedo apenas tres horas más tarde.

También por la mañana, la niebla complicó la circulación por el puerto de Pajares, por donde durante unas horas no pudieron transitar los camiones. Y por la tarde y primeras horas de la noche, las inclemencias del tiempo afectaron a la autopista del Huerna. En torno a las 20 horas, los carriles izquierdos tuvieron que ser cortados al tráfico por la nieve caída sobre la calzada.


18 puertos con cadenas

Según informó la Consejería de Fomento, la situación de inestabilidad llevó a que el uso de cadenas fuera aconsejable en 18 puertos de montaña: los de Tarna, San Isidro, Ventana, Somiedo, San Lorenzo, Leitariegos, Cerredo, el Palo y la Marta. También hubo nieve y hielo en los altos de los Bedules, la Cobertoria, del Pozo de las Mujeres Muertas, la Campa de Tormaleo, del Acebo y del Campillo; así como en las carreteras que unen Poncebos y Sotres, en la de Sotres al límite con Cantabria y en los accesos a Genestoso, en Cangas del Narcea. El puerto del Connio y la carretera de acceso a los lagos de Covadonga estuvieron cerrados al tráfico durante todo el día.

La jornada de esquí -la temporada se amplió la semana pasada en vista de las actuales condiciones para la práctica de este deporte- también se vio afectada. Valgrande-Pajares no pudo abrir al público por culpa del temporal, así como por motivos de seguridad de los remontes mecánicos. Mientras, 86 fueron los esquiadores que decidieron desafiar al clima en Fuentes de Invierno. A pesar de las continuas nevadas y de las fuertes de rachas de viento, sobre todo en las zonas medias y altas de la estación, cinco pistas -con 3,5 kilómetros esquiables- fueron abiertas al público. A primera hora fueron necesarias labores de acondicionamiento de los remontes debido a la gran cantidad de nieve acumulada. Ambas estaciones tienen previsto abrir el próximo fin de semana.

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Fuente: El Comercio