“Mucho antes de que terminara la guerra, nosotros nos habíamos preparado ya para la posguerra. Alemania estaba derrotada, eso lo sabíamos. Y los vencedores se querían aprovechar del enorme esfuerzo tecnológico que había hecho ese país durante más de diez años. Aprovechar la maquinaria no se podía porque estaba destruida. Lo único que se podía aprovechar eran los hombres. A nosotros también nos interesaba eso.
Les hicimos saber a los alemanes que les íbamos a declarar la guerra para salvar miles de vidas. Intercambiamos mensajes con ellos a través de Suiza y España. Franco entendió de inmediato nuestra intención y nos ayudó. Los alemanes también estuvieron de acuerdo.
Cuando terminó la guerra, esos alemanes útiles nos ayudaron a levantar nuevas fábricas y a mejorar las que ya teníamos. Y de paso, se ayudaron a ellos mismos.”
Juan Domingo Perón
Así comienza la guía turística “Bariloche Nazi”, que Pau y yo compramos en una librería de Bariloche, para intentar comprender o conocer el por qué se relacionaba tanto a la ciudad patagónica de Bariloche con el nazismo, con los nazis huidos tras la segunda guerra mundial… y nos topamos con varios libros que relataban detalladamente, cómo los alemanes se fueron haciendo con la Patagonia Argentina, y cómo incluso tuvieron intenciones de “apropiarse” de ese territorio.
Son curiosas las librerías de allí…, entras… preguntas por un libro… te sientas… pides un café… hojeas el libro… y si te gusta te lo compras…, de paso te tomas el café.
La verdad es que la ciudad de Bariloche, se encuentra enclavada en un lugar que recuerda perfectamente un paisaje suizo o austriaco… enormes montañas y lagos impresionantes, lo que hizo que los alemanes encontraran un segundo hogar, lo más parecido a su tierra natal.
En un primer momento levantaron una Catedral, de claro aspecto nórdico
Si bien desde fuera parece algo antiguo, la verdad es que cuando entras te decepciona un poco, pues nunca fue terminada en su totalidad, y es moderna, pues sus cimientos y estructura son de hormigón. Aquí os dejo unas fotos de la Catedral por dentro
Fijaos al fondo en las empinadas escaleras de caracol que dan al campanario… Glups,…
Con razón no hay Sacristán ahí….
Una vez levantada la Catedral, intentaron que el centro del pueblo se estableciera en torno a ella…, no se por qué… pero no fue así, de tal manera que lo que es el centro de Bariloche, lo que ellos denominan “Centro Cívico”, en donde se encuentra la biblioteca, el museo patagónico y el Ayuntamiento (lo que es la parte más vieja de la ciudad), está un poco alejado de la catedral. Si bien, las construcciones mantienen el mismo estilo nórdico, y los mismos materiales… fueron levantados de forma contemporánea.
Ayuntamiento (Centro Cívico) y Biblioteca
Museo Patagónico
La verdad es que el Museo Patagónico estaba genial… tenían un montón de animales disecados y todo tipo de objetos: elementos personales de Perito Moreno, de los colonos…
Me sorprendió ver, entre los efectos personales de Perito Moreno, una escarapela de los Boy Scouts…. como yo lo fui durante 9 años, pregunté…. y resulta que el Sr. Moreno fue el fundador del movimiento scout argentino… fíjate tú .
En estas fotos, os podeis hacer una idea de cómo es esa plaza central de Bariloche, por supuesto con la tremenda bandera Argentina en el medio.
Esto es lo que veríamos desde la puerta del centro cívico
El pequeño puerto de donde parten los catamaranes para las excursiones por el lago
La plaza, propiamente dicha… en el centro están siempre unos amables argentinos con unos preciosos San Bernardo, con barrilete incluído… y hasta con unos cachorritos que se te cae la baba…. NI TE ACERQUES… pues cámara en mano te acorralarán para que te saques una foto con el perro en cuestión… menudos listos…. menos mal que Pau y yo ya veníamos de Buenos Aires curtidos en todo tipo de “listos atrapaplata”, y salimos indemnes de sus ataques…. Ufff…
Bueno…. Pues la plaza, en su lateral derecho, tiene un par de arcos de piedra por los cuales pueden circular los coches, y además da entrada a la plaza.
En el medio de los arcos hay una inscripción…. le saqué una foto y os la pongo por si hay algún friki que esté interesado en lo que pone…. no se qué del pueblo…
Y ahora al temita…. Los shoppings (pal que no se haya tragado el Argentina 1: Buenos Aires, que haga el favor…… es la calle de las compras… osseaaa…).
Pues eso… que por esos arcos se accede “directamente” a la calle de tiendukis de Bariloche. Es curioso… porque durante el día no hay ni un alma. Nosotros cuando llegamos, pensamos….. menuda mierda, no?... ya ves… na de ná…..
Pero ojito…. Que cuando llegan las seis de la tarde… menudo ambientazo… casi no se puede ni andar… si…. Es que durante el día tol mundo está en la Estación, y como cierra a las 5.30, (y la verdad que tampoco hay mucho más que hacer por ahí…) pues todo el mundo a la calle de tienduquis… jejjejej… está fenomenal… fue el sitio con más ambiente de todos (salvo Buenos Aires, claro.. que si lo que quieres es ver argentinos, vete por la calle corrientes a las tres de la tarde…)
En fin…. Que como estar todo el día de compras y de acá para allá da mucha hambre…, pues nos fuimos a buscar un sitio para darnos un gustillo argentino; y tras mucho buscar, y casi a la desesperada entramos en una parrilla que está pegadita a la plaza, y no veas….. o mejor sí… mira, miraaaaaaaaaaa…..
No he vuelto a lavarme los piños desde ese día, creo que aún conservo entre dos muelas un trozo de ese manjar… uff…. muerte al Colgateeeee….
Es una pena que no nos acordemos del nombre, pero gente majísima, nos trataron fenomenal y tirado de precio (fue el mejor, y el más barato sin duda). Creo que tengo una tarjeta por algún lado. Además tenía un jardincito delante con árboles típicos de la patagonia como el arrallán.
Bueno…. y antes de pasar a la aburrida y tediosa parte de la nieve…. comentaros que ¡como no!, no podía faltar, ni ser de otra manera…:
Y en su interior… (somos los típicos gilipollas que vamos a la patagonia y entramos en un sitio de Galicia)… una guitarra española y una gaita…
Y Doña Leticia y su Majestad el Príncipe Felipe (que tal y como está todo… cualquiera se anda con coñas…)…
Bueno… y como tampoco podía faltar…. Pues…..
Pero en fin…. Vayamos al grano y a lo que verdaderamente no os interesa…
CERRO CATEDRAL
Por donde empezar…. (…aparte de que no me pienso despelotar nunca más para sacarme una foto con la camiseta de la mona…. Que casi me quedo pajarito…., sin decir nada del pito… claro), pues que Cerro Catedral es una enorme tremenda estación, que se encuentra a unos 24 km de Bariloche.
Normalmente, en temporada alta, los hoteles disponen de servicio de transporte entre estos y la estación, pero en temporada baja (adivinar quién fue en temporada baja), pues no. Así que….. tuvimos que alquilar un coche para movernos por ahí, porque si no, nos íbamos a arruinar como tuviéramos que subir y bajar de la estación en taxi.
Para empezar… unas fotos de Cerro Catedral desde arriba, con la zona de tiendas, el aparcamiento….
En la estación…. Todo se llama Cóndor… así que no perdáis el tiempo preguntando ¿dónde puedo alquilar unos guantes?, porque te dirán: ahí enfrente en el no se que.. cóndor…; para comer? En el Cóndor Burguer….. o yo que se….. todo es Cóndor… incluso este Cóndorreportaje que me estoy currando es Cóndor.
Todo menos el “Centro Comercial Las Terrazas”… uff… menudo sitio, que lujo, pero antes de nada (es que ya no aguanto más… ) mirad qué baños… jo pé…
En cuatro palabras a co jo nante…, se podía comer ahí…. Tenían servicio permanente. Había un servicio de limpieza constante, (y un platito en el medio también, pa que dejaras la propina). A mí me tuvo que sacar el servicio de seguridad del Centro Comercial, porque no quería salir… intenté convencer a Pau para quedarnos a vivir allí, pero no quiso. Nunca lo entenderé…¿?.
Y lo mejor… (aparte de los baños), eran estos magníficos aparatos secaguantes, me parece una idea genial que tal vez si podían incorporar en Leita.
MIRAD!!!
Bueno, y ahora al tema que nos interesa: la estación está fenomenal para todos aquellos que se inician o tienen nivel medio, pues hay unas larguísimas pistas verdes y azules, la mayoría de ellas (aunque también las hay negras y rojas). Además, tienen un telesilla de seis con cúpula incorporada, lo que está genial para cuando se pone a nevar (como nos pasó a nosotros, y creed que se va fenomenal). Para muestra un botón:
El telesilla de 6 partia del centro comercial Las Terrazas, y podías acceder bien desde él, o por fuera (por un lateral, como todos).
En la parte baja de la estación, todos los edificios estaban construídos más o menos manteniendo el mismo estilo, con las paredes en verde y los tejados negros, lo que hacía que todo fuera más uniforme y bonito, había cantidad de perros sueltos, muy amigables, que se iban de paseo con cualquiera.
Hacia la parte baja, más o menos estaba bien, sin niebla… aunque llovía un poco, lo cual también era interesante, pues al ir subiendo… se pasaba por todas las fases de solidificación del agua hasta convertirse en nieve. En la parte media, la cosa ya se ponía bastante fea y los telesillas que nos tenían que llevar a las cumbres estaban cerrados o solo para esquiadores “expertos” (nosotros nunca llegamos a subir… claro).
Fijaos en la niebla que había…
Los de la estación decían que con la niebla había “visión plana”, y cuando lo compruebas es cierto… no sabes ni hacia dónde vas, ni si vas hacia arriba o hacia abajo (bueno… eso si, pero no sabes el grado de inclinación ni nada…jeje).
En la zona media estaba colocada esta cafetería, y en su parte del fondo la tenían montada en plan friens… con sofás en círculo. Estaba muy bien; y si hace bueno, tiene que haber buenas vistas, pues la tenían colocada en forma de mirador.
Otro dato interesante, es que cuando pasabas esquiando, veías a unos tipos metidos entre los árboles con petos naranjas y cámara de fotos en ristre. Al principio creí que eran los colegas de algún otro que bajaba, para grabar la bajada, pero luego nos dimos cuenta de que se trataba de fotógrafos profesionales que al cierre de la estación, te invitaban a pasarte por su centro fotográfico, en donde podías seleccionar las fotos que quisieras y te las imprimían. La verdad es que se nota… nosotros elegimos estas dos, y se nota la diferencia…
Lo malo de las estaciones tan grandes, son las zonas de escuela que tienen… son enormes… allí había cientos de chavales aprendiendo… todos de colegios, con las ropas iguales… formaban auténticos ejércitos, y aún encima organizaban tremendas guerras de bolas de nieve entre los distintos colegios (más bien institutos, pues ya estaban un poco talluditos)…
El primer día, un chico de nombre “opai”, nos enseñó la estación, esta foto va dedicada a él, por si nos lee
Pero bueno… como no todo va a ser guay… también tenía algunas instalaciones precarias, como el telesilla “princesa”, que era de baras de madera del año catapún chispún… joer… y además, menuda altura cogía el bicho…
Os dejo ahora unas fotos del paquetón que cayó la noche anterior… pa que flipeis un poco… con deciros que los esquís no había quien los moviera… (ya me explicareis como carajo se esquia sobre nieve en polvo, eehh????)
Bueno, ahora os dejo una foto técnica, pa los entendidos…. Que yo no lo soy…. Estos son los cañones que empleaban allí…
La fotuca de rigor (pa Luisán… jejeje), maestro
Bueno, cuando todo terminaba, nos íbamos al Hotel, llamado Villa Huinid, a 2,5 Km de la ciudad… estaba muy bien, con ascensor panorámico, y ciertas aves “exóticas”, llamadas Bandurrias…
Allí cenábamos algo ligero…
Al cuarto día… al aeropuerto, para ir rumbo a Calafate… (en el capítulo 3)
FIN DE LA 2ª PARTE
(Dios … creí que no acababa nunca…. Creo que voy a pasar de contaros más, eh…)