La nieve cubre San Glorio y de haber estación hoy ya se podría esquiar
En los valles del Naranco y de Lechada hay espesores de casi medio metro y de un metro en lo alto Los vecinos de la zona reclaman el inicio de las obras de la infraestructura «prometida»
La falta de nieve está causando una cierta preocupación entre los responsables de la estaciones de esquí de la provincia dado que se acerca el puente de la Constitución donde los días de vacaciones aseguran una alta afluencia de amantes del esquí y sus derivados. Todos miran la cielo y a los informativos del tiempo a la espera de que se anuncien las llegadas de las primeras nieves.
Frente a esta preocupación generalizada, sólo hay un excepción, San Glorio y los habitantes de la población más cercana, Llánaves de la Reina, que no miran al cielo dado que la nieve ha llegado y ha cubierto por completo las zonas donde se pretende contruir la estación de esquí. Apenas a trescientos metros de Llánaves se aprecia ya la nieve que en el valle del Naranco y en el valle de Lechada registra ya espesores de más de medio metro, según han constantado algunos de los vecinos.
Ayer la niebla cubría por completo todo el paraje del valle del Naranco, pero este periódico pudo comprobar cómo, a partir de los 1.600 metros, las montañas estaban cubiertas de nieve. Todo esto no es que sea una excepción, sino la simple realidad de «toda la vida», como explican algunos vecinos.
A 2.000 metros, casi un metro
Mientras en San Isidro no hay una pizca de nieve, San Glorio cuenta ya con medio metro, aunque algún vecino de Llánaves comenta que en la parte más alta, por encima de los 2.000 metros ya hay casi un metro.
«San Isidro, en apenas cuatro años ha recibido la friolera de casi 30 millones de euros, mientras que San Glorio sigue siendo una promesa donde sólo se habla de hacer pero nada de invertir», replican los vecinos de la zona a este periódico, quienes acto seguido manifiestan que San Glorio sigue siendo la eterna realidad de los políticos y la desesperación de los vecinos de una montaña oriental «deprimida», puntualizan.
A esto hay que unir los hechos ya contrastados como que la nieve llega antes a San Glorio que a San Isidro o que cuando ya ha desaparecido en San Isidro, las montañas de San Glorio aún cuentan con varias zonas con suficiente nieve para la práctica del esquí. Además, San Glorio, por sus bajas temperaturas, consigue que la nieve perdure aún más y que, en una hipotética y futura estación, la acción de los cañones permitiera tener el blanco elemento hasta bien entrado el mes de mayo o incluso en junio.
«San Isidro, en cuatro años, ha recibido casi 30 millones, mientras que San Glorio sigue siendo una promesa donde sólo se habla de hacer pero nada de invertir»
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