Año de nieves, año de Fuentes

La esperada inauguración de la nueva estación invernal asturiana, en el alto Aller, marca la campaña de esquí que arranca el sábado con importantes novedades en Pajares y Leitariegos

Los aficionados al esquí deshojan con impaciencia el calendario y devoran los partes meteorológicos a la espera de predicciones de nieve, en un otoño caluroso. El próximo sábado arranca una temporada blanca llamada a hacer historia en la región. Más de medio siglo después de la apertura de Valgrande-Pajares, el Principado inaugurará en febrero de 2007 su segunda estación invernal, la de Fuentes de Invierno, situada en la vertiente allerana de San Isidro. Con un presupuesto de 10,8 millones de euros, ofrecerá un dominio esquiable de ocho kilómetros y estará conectada con San Isidro a través de un remonte común.

Mientras las empresas apuran los trabajos para que la segunda estación asturiana esté lista dentro de los plazos fijados por la Dirección General de Deportes, el resto de complejos invernales del Noroeste registran estos días una intensa actividad para que todas sus instalaciones estén operativas el sábado. A partir de ahí todo queda pendiente de que nieve, aunque, en principio, parece que los aficionados tendrán que esperar, al menos, hasta comienzos de diciembre y al puente de la Constitución.
l Por lo que se refiere a Valgrande-Pajares, la Dirección General de Deportes ha invertido 3,2 millones de euros en diversas mejoras para la ya inminente temporada. Sin duda, la principal novedad es la instalación de 29 cañones de nieve artificial en la pista de El Tubo, que, gracias a las innivaciones de las últimas temporadas, presume ya de ser una de las mejores de todo el Noroeste. A esta actuación hay que sumar la sustitución del colector del arroyo de Fuente La Reina, así como mejoras en tres telesillas, la compra de un camión cuña equipado con un sistema de sal y la adquisición de una moderna máquina pisapistas. Ya fuera de los equipamientos deportivos, se están ejecutando las obras de mejora del alumbrado de la urbanización del Brañillín, una antigua reivindicación de los residentes en la zona.
l Leitariegos. Las principales novedades de este año en las estaciones de León se centran en Leitariegos, complejo que ha recibido una inversión de siete millones de euros. Así, este año estrena tres nuevas pistas, con lo que pasa de 5,8 a 7 kilómetros esquiables. Además, la Diputación provincial ha financiado la instalación de 68 cañones de innivación artificial para tratar de aumentar el número de jornadas de apertura en una instalación que este año también presenta a los aficionados un nuevo telesquí en La Ferradura, un edificio de servicios múltiples en su parte baja y una cafetería en la zona alta.
l San Isidro, por su lado, abre la temporada estrenando dos nuevas áreas para debutantes. Una está en la zona de Cebolledo, en la parte posterior del edificio de usos múltiples, y la otra en Riopinos, a la derecha de la zona de taquillas. Además, durante el verano se ha procedido a la rehabilitación de la carretera que une las partes baja y alta del complejo, actuación en la que se han invertido 222.000 euros. La estación tiene en proyecto, a falta de los estudios de impacto ambiental, la instalación de cañones de nieve en las áreas de debutantes y la instalación de una silla cuatriplaza en Cebolledo.
l En Cantabria, Alto Campoo afronta la nueva campaña con la rehabilitación de la carretera de acceso y la construcción de nuevas plazas de estacionamiento como principales novedades. Dentro del ámbito deportivo, destaca el montaje de un sistema de manos libres en los accesos a los remontes, así como diversas mejoras en el edificio de servicios, en el área de Calgosa y en las zonas de salida y llegada de la cota de 1.650 metros.



Fuente: La Nueva España